Pedro Juan Caballero - 07 de July de 2025 |
La Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA) emitió una nota interna a la Prefectura Naval Argentina en la cual informa que en 30 días más se suspende la operatividad en la zona de transbordo ubicada en el kilómetro 171 del río Paraná Guazú (que corresponde al tramo argentino de la hidrovía). La Prefectura del vecino país no respondió aún esta iniciativa, pero se espera que lo haga antes del plazo que dispuso el organismo aduanero. Sobre esta medida, desde nuestro país, el gremio naviero sostiene que no hay un sustento técnico y medioambiental para suspender el transbordo en este lugar.
Para Bern Günther, presidente de Cafym, esta restricción no solo carece de fundamento operativo o ambiental, sino que generaría un incremento en los costos de los combustibles importados por Paraguay, afectando directamente a los consumidores y al sector productivo. El empresario señaló a Universo 970 AM que ese transbordo se realiza en ese sitio (Paraná Guazú) desde 1981 y nunca hubo un accidente o episodio de catástrofe en la zona. “No hay un antecedente de ningún evento así, dramático, drástico. No hubo una explosión, ni un incendio, nada que se pueda argumentar y de hecho no fue lo argumentado”, precisó Günther.
El titular de Cafym aseguró que hay premura en resolver este asunto ya que en principio la aduana argentina solo dio unas pocas semanas. “Tenemos que moverlo para que esto no suceda. Nosotros desde el día uno que tomamos conocimiento de esta nota, ya de inmediato hablamos con las autoridades. Hay que resaltar que siempre hay buena llegada ahí, buena comunicación con el Ministerio de Industria, con la Unión Industrial Paraguaya, con la Cámara Nacional de Comercio y con el Ministerio de Relaciones Exteriores”, destacó.
Explicó que de aplicarse la medida, el encarecimiento de los combustibles se debería a la necesidad de redirigir las operaciones logísticas hacia puertos alternativos, con mayores distancias y costos asociados. Günther advirtió que esto perjudicaría especialmente a Paraguay, país que depende en gran medida de la importación de carburantes para abastecer su mercado interno. “Es una barrera artificial que no resuelve ningún problema real, pero sí crea uno nuevo: mayor inflación en los precios de la energía", afirmó.
Desde Cafym insistieron en la necesidad de un análisis técnico conjunto entre Argentina y Paraguay, bajo criterios transparentes y basados en estándares internacionales de navegación. “El Paraná Guazú es una ruta estratégica para el comercio regional; cualquier restricción debe justificarse con datos concretos, no con arbitrariedades”, señaló Günther. La Cámara espera que las autoridades argentinas reconsideren la medida ante el riesgo de distorsionar el mercado de combustible del Paraguay.
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